La empresa Satena anunció ayer durante el debate realizado por la Comisión cuarta de la Cámara de Representantes sobre el aeropuerto de Corozal, que no está cerrando las puertas para revisar la situación de la operación desde esta ciudad hacia Bogotá y viceversa, en la medida que haya una estabilización de su flota y las rutas.
El coronel Miguel Eduardo González, vicepresidente de Satena, escuchó en el auditorio de la Gobernación a representantes de autoridades locales, departamentales, gremios y comité pro defensa del aeropuerto de Corozal, quienes reclamaron de manera clara y precisa que se defina si van a operar nuevamente dicha ruta o que permitan que otras aerolíneas ofrezcan el servicio con tarifas cómodas para los usuarios de la Región.
“Teníamos una red de rutas muy amplias en el país que no era fácil de mantener, por ejemplo, una gran limitación es operar en un gran número de aeropuertos sólo hasta las 6 de la tarde porque no hay ayudas que permitan a los pilotos hacer una operación distinta”, indicó Miguel Eduardo González.
Dijo que la empresa hizo su mejor esfuerzo para tratar de no incumplir con la operación en el aeropuerto de Corozal, “ si uno revisa los vuelos cancelados, realmente el número no es tan alto frente al número de operación”, aseveró.
Se requiere solución estructural
“La Subcomisión de la Cámara de Representantes y autoridades del departamento, tenemos como objetivo principal buscar una solución estructura al tema aeropuertario en Sucre. Son dos temas que hay que aclarar que es la suspensión del vuelo de Satena Corozal-Bogotá y viceversa, y la otra con el desarrollo competitivo de nuestros aeropuertos el de Corozal y Tolú”, dijo el Representante sucreño.
Manifestó que a partir de la visibilización del problema esperan tocar las puertas del Gobierno Nacional para que miren que en Sucre la gente necesita desarrollo, acompañado con temas como la buena prestación de servicios aéreos.
Dijo que lo que ha querido la Comisión cuarta es ser un facilitador del dialogo social e instititucional, para que no se llegue a las vías de hecho que desafortunadamente parecer ser la práctica que últimamente se está presentando en el País.
Asimismo, Juan Felipe Lemus, representante a la Cámara del departamento de Antioquía, explicó que el Congreso de la República en el año 2010 le tiró un salvavidas a la empresa Satena de cerca de $98 mil millones aprobando la capitalización de la misma, para cambiar la flota que permitiera prestar el servicio social en regiones como Sucre.
“La gran preocupación que tenemos es que Satena no está cumpliendo con el objeto social de garantizar la cercanía de los centros económicos del País con las regiones más apartadas. Lo que estamos observando es que estas rutas se están suprimiendo y cada vez más está pensando el factor rentabilidad económica y va desapareciendo el factor rentabilidad social”, aseveró.
Dijo que exigen a la empresa y al Gobierno Nacional que definan una vez por todas cual es el real interés si continuar prestando el servicio social o pensando en la rentabilidad económica de la empresa.
FUENTE: EL UNIVERSAL 31 de Agosto de 2013
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